Informar sobre los riesgos en el mar
Antes de la salida, el patrón debe concienciar a su tripulación de los riesgos que conlleva la navegación. No todo es diversión y juego Hombre al agua, colisión, caída, lesión, error de rumbo, mala maniobra, vía de agua, tormenta, etc. Estas situaciones pueden producirse y hay formas de gestionarlas, gestionando el pánico lo mejor posible. Informar ya es tranquilizador.
Conocer a su tripulación
Es importante conocer el nivel de cada persona y sus capacidades/habilidades para manejar ciertas situaciones antes de partir. ¿Es el tripulante autónomo? ¿Conoce el vocabulario marino? ¿Es capaz de manejar una cuarta parte? ¿Pueden tomar decisiones? ¿Saben analizar una situación meteorológica? ¿Tiene tendencia al pánico? ¿Está tranquilo y calmado? ¿Tiene un lado tranquilizador?
Su formación y actividad profesional pueden ayudarle a tratar ciertos aspectos mejor que otro miembro del equipo. Por ejemplo, un profesional de la salud puede mantener mejor la calma ante una lesión o enfermedad. También pueden estar más capacitados para prestar atención. Intenta asignar a cada persona una misión secundaria que tendrá que llevar a cabo en caso de problema: uno avisa a los servicios de emergencia, el otro maniobra, el tercero tranquiliza
Por último, es una buena idea nombrar a un patrón adjunto que sustituya al patrón en caso de incapacidad.
Comprobar la posición y el funcionamiento de los equipos de seguridad
Anticiparse es protegerse. No vas a buscar tu chaleco salvavidas en medio de un incendio. Indique también a su tripulación dónde se encuentran los diferentes equipos y cómo utilizar los principales: VHF, chaleco salvavidas, cuerda de seguridad, arnés, extintor, etc. Compruebe que funcionan correctamente.
Chalecos, arneses, cuerdas de seguridad, bengalas, balsa salvavidas, VHF, boya de herradura, luz antivuelco, pértiga IOR, antorchas, linternas, GPS (botón MOB), extintores, baterías, válvula de corte de gas, válvulas del casco
Un mapa con la ubicación de los principales equipos, expuesto junto a la mesa de mapas, puede ser un buen apoyo durante la sesión informativa y especialmente en caso de incidente.
Una vez más, compruebe las habilidades de los miembros de su equipo en el uso del equipo de seguridad. ¿Quién ha acertado alguna vez con un cohete de mano? ¿Desplegaste una balsa salvavidas? ¿Ha realizado una maniobra de hombre al agua? Estos pueden ser aliados inestimables según la situación que se presente.
Establecer reglas
El patrón debe explicar a su tripulación las normas vigentes a bordo en función de una situación determinada: desplazarse a bordo sujetándose, llevar chaleco salvavidas, llevar arnés, utilizar las velas, equipos específicos, etc
Por ejemplo, para salir a la cabina, los niños deben llevar su chaleco salvavidas. No se les permite ir a la cubierta de proa sin un asistente. Por la noche, los chalecos salvavidas deben ser usados por todos y deben estar acoplados a una línea de vida y a un arnés
Prepare su navegación
Cada día, es importante preparar e informar a la tripulación del destino previsto, el número de millas y el tiempo estimado, la elección de la ruta, los posibles peligros, los posibles refugios, las maniobras previstas y una descripción del punto de llegada. Compartir la información es una garantía de seguridad.
Mira la previsión meteorológica para ver cómo va a cambiar el tiempo, qué velas vas a utilizar y cómo te vas a equipar.
Por último, defina las funciones de cada persona, quién será el timonel, la tripulación, el cocinero, etc.